Las emociones negativas, como el mal humor, la
ira, el miedo, el rencor, la preocupación, la
tristeza, la depresión, son manifestaciones de
bloqueos energéticos o de energías impuras y de
bajo nivel en determinados órganos, los cuales
originan un desequilibrio energético,
disminuyendo el nivel del Ki, y que si persisten,
darán lugar a la aparición la enfermedad.
Si disponemos de la suficiente energía en nuestro sistema podremos usarla para abrir los bloqueos y liberar la circulación del Ki, de forma que todos los órganos afectados reciban más fuerza vital y expulsen la energía negativa.
La sonrisa tiene el poder de transmitir amor y energía positiva hacia quien va dirigida, ya que una sonrisa siempre es un signo de amor y de fraternidad universalmente aceptado.
Al sonreír transmitimos energía amorosa y curativa, y el que la recibe se siente acogido y reconfortado por ella.
La sonrisa influye en la glándula timo, que es la reguladora de la energía en nuestro organismo: el timo produce unas células especificas, cuya misión es aislar y destruir las células anormales, y si la actividad del timo es baja, estas células anormales se multiplicaran, pudiendo llegar a desarrollar un tumor.
Por ello, mantener el timo estimulado energéticamente activo contribuye a prevenir la formación de tumores.
La auto sonrisa o sonrisa interna dirigida a uno mismo es un poderoso aliado de la auto terapia y del auto masaje, ya que con ella transmitimos amor a nuestro Yo Interior y a nuestros cuerpos físicos y energéticos.
En nuestro quehacer diario estamos sometidos continuamente a situaciones y circunstancias indeseables que producen estrés en nuestro cuerpo, en nuestra mente y en nuestro espíritu: las tensiones de la vida moderna, el continuo bombardeo de malas noticias, el exceso de trabajo, el hábito de fumar, canceroso para ti e irrespetuoso con los demás, la falta de contacto humano, las preocupaciones, la contaminación del humo, los tóxicos alimenticios que constantemente ingerimos, como café, alcohol, dulces, conservantes, colorantes; la prisa, la ansiedad, la falta de reposo, los autor reproches y los reproches de los demás, que interpretamos como cuestiones personales; los excesos con las comidas, y especialmente la negación del amor a nosotros mismos, se van acumulando en nuestro ser; mientras que el cuerpo y el espíritu disponen de salud y energía suficientes para asimilarlos, no llegamos a percibir claramente sus efectos demoledores, pero llega un momento en que no puede más, y nos lo hace saber en forma de dolencia o enfermedad, resultado de años de estrés acumulado y de esos pequeños abusos a los que no dábamos importancia.
Los bloqueos energéticos producidos por estas causas nos impiden disfrutar del mundo exterior, mientras que la serenidad, la relajación, la paz, el descanso, la alegra y principalmente el amor por todo nos abren a la comunión con el universo.
La sonrisa interior comunica a nuestro cuerpo físico, a nuestra mente y a nuestro espiritu- la serenidad, la alegría, la paz y el amor del Creador, que interiorizamos a través de este simple gesto cargado de energía curativa.