lunes, 1 de octubre de 2012

EL NIÑO Y EL ADULTO


 
Todos tenemos dos lados diferenciados en nuestra personalidad, el Niño y el Adulto.
 
 
 Cuando están bien conectados todo funciona bien, pero cuando se desconectan sobreviene el conflicto... y una amarga sensacion de vacio e incompletud.
A medida que crecemos, se nos pide "madurez" y se nos inculca que "ya no tenemos edad para actuar como niños" ... reprimiendonos asi, nuestro lado inocente e infantil... el cual aun de adultos es sumamente necesario para crecer...
Nuestro niño tiene unas emociones completas, intensas, de alegría, de felicidad, de tristeza.















El trabajo con el Niño Interior es quizás uno de los más
 
profundos y sanadores.
 
Lo que sí podemos hacer es tomar nuestro poder aquí y
 
ahora y dejar de tratar a nuestro niño como nos
 
trataron a nosotros. Entonces no podiamos elegir
,
ahora sí. El momento de poder es siempre el presente.
 



 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Volver a establecer una relación con nuestro niño desde la alegria, el amor y la
comprensión nos ayudara a sanar nuestra dañada autoestima.
Es la única manera de realizar cambios positivos en nuestra vida: establecer relaciones sanas, cuidar nuestro cuerpo, trabajar en algo que nos gusta, ser prósperos, amar incondicionalmente y llegar a sentirnos plenos y feliz.
 


Cuando cambiamos desde el AMOR todo nos sale bien.




No hay comentarios:

Publicar un comentario