La comunicación diaria con nuestra/o niña interior, contribuye a nuestro bienestar.
Por lo menos una vez por semana toma a tu niño o niña interior de la mano y pasa un tiempo en su compañia. Haced algo especial juntos, cosas que te gustaba hacer en tu infancia.
Mi niño interior sabe jugar, amar y maravillarse.
Cuando apoyo esta parte de mí, se abre la puerta de mi corazón, y mi Vida se enriquece.

LUISA TE AMO CON TODO MI CORAZÒN
Qué linda! jaja Te parecés a mí cuando era chica. Lindo blog. Saludos
ResponderEliminar